2023 | Dir. Scott Waugh | R | 104 mins. | Lionsgate
Lo que realizó Sylvester Stallone (Rocky, Rambo) en el 2010, cuando escribió y dirigió The Expendables –en esencia–, no era una mala idea. En un panorama comercial repleto de películas de acción “sanitizadas” y dependientes de CGI, traer de vuelta el visceral estilo que caracterizó su filmografía durante el peak de su carrera, acompañado de otros colegas relevantes en el género, era una apuesta que podía rendir frutos. Y así fue.
The Expendables fue un éxito aunque no haya sido del todo buena. A pesar de apelar a ser una película “palomera”, se quedó corta en su ejecución; pero la “novedad” ver a Stallone en pantalla junto a Jason Statham (Transporter), Jet Li (Unleashed), Dolph Lundgren (Universal Soldier), Bruce Willis (Die Hard), Arnold Schwarzenegger (Terminator) y otros más, fue el equivalente de ver a los Avengers de la testosterona.
Dos años después llegó The Expendables 2 (2012) y esta sí abrazó el concepto de mejor forma. Con cambio de director, alguito de humor y menos pretención, acabó siendo bastante llevadera. Sin contar que añadieron al combo a Jean-Claude Van Damme (Double Impact) y al “inmortal” Chuck Norris (Walker, Texas Ranger). Esta fue el “punto alto” de la franquicia, ya que The Expendables 3 (2014) se descarriló de la fórmula. Un cúmulo de malas decisiones creativas resultaron en que la tercera vuelta fuese un pequeño bodrio que ni las adiciones de Wesley Snipes (Blade), Antonio Banderas (The Mask of Zorro) y Harrison Ford (Indiana Jones) pudieron ayudarle.
Nueve años después, Expend4bles (2023) llega a “revivir” esto y, pa’ serles sincero, era mejor no hacerlo.
Expend4bles arranca con el hurto de unas armas nucleares que, de llegar a ser detonadas, podrían dar paso a la Tercera Guerra Mundial si los “Expendables” no logran evitarlo.
Expend4bles se va abismalmente por la borda. Atrás quedaron los días en que estas películas eran “malos” homenajes adredes de la época “de gloria” de la acción. En esta cuarta ocasión, simplemente, todo es malo de verdad. Expend4bles no solo es un huequísimo ejercicio que apenas retiene el extraño encanto de las anteriores, sino que como película del género es deprimente.

Ni el elenco se salva. No sé qué carajo les pasó aquí. To’ el mundo está en piloto automático. Nadie en el bando de los “Expendables” se destaca. Ni Stallone en su poquito tiempo en pantalla ni Statham tratando de hacer de tripas, corazones. Los nuevos integrantes son delineados por el arquetipo que les toca interpretar. Megan Fox (Transformers) es la “sexy”, 50 Cent (Den of Thieves) el afroamericano por default, Jacob Scipio (Bad Boys for Life) ser una copia Great Value de otro personaje y Levy Tran (The First Purge) ser la asiática mortífera. Cero personalidad, todo estereotipo. Y ni hablar del total desperdicio de Iko Uwais (The Raid) y Tony Jaa (Ong-Bak). Eso sí que dio pena.

Quisiera poder abundar más y decirles cositas bonitas, pero Expend4bles –en resumidas cuentas– está grave. Acabó convirtiéndose en la antítesis de lo que era o aspiraba a ser la franquicia. Tras de ser una innecesaria secuela que llegó tarde, es una pésima película de acción que no se esmera ni por lo más básico: tener buenas secuencias y, en términos generales, entretener. Quizás pueda dársela alguito por aparentar no importarle valer madre, pero raya en lo insultante su inconsecuencia, lo FEÍSIMO de su aesthetic de videojuego de celular, lo horriblemente editada que está y el apenas “intentarlo” con su clichosa y predecible trama. Cualquier inteligencia artificial (AI) estaría orgullosa de esto.
Expend4bles casi me hace pedirles perdón a las anteriores. Aquellas, con to’ y que se paseaban entre lo mediocre y lo pasable, no “herían” a uno. En cambio, esta sí jode un poco las pupilas.
Fácilmente, entre lo peorcito que he visto este año. Espero que Expendable5 no vea la luz del día.



Leave a comment